La filosofía es una de las disciplinas que cuenta con una mayor tradición e historia. Esto se debe a que en el pasado incluía el conjunto del saber, de manera que tanto las ideas que sustentaban una cosmovisión del mundo como las reflexiones psicológicas y las referidas al movimiento de los cuerpos y de los planetas formaban parte del pensamiento filosófico. Esta disciplina está considerada la madre de todas las ciencias, como un tronco del que se han ido desgajando ramas que han adquirido autonomía propia. Aunque parte de los contenidos filosóficos han pasado a ser disciplinas científicas, sigue teniendo una gran variedad de problemas propios, que han permanecido vivos y abiertos al debate desde la Antigüedad hasta el presente, como, por ejemplo, la conciencia, el libre albedrío, el origen de la conducta o el lenguaje.
La filosofía no está únicamente circunscrita a los especialistas, ya que se ocupa de cuestiones fundamentales que preocupan a todos. Cualquier persona puede adoptar una actitud filosófica siempre que reflexione sobre conceptos básicos de un determinado ámbito o disciplina. Por ejemplo, cuando un físico, como Lee Smolin, afirma que es problemático que la noción de tiempo se reduzca a una variable dentro de una fórmula porque esta operación puede ocultar aspectos importantes de la realdad, está adoptando una actitud filosófica. Existen infinidad de ejemplos que ponen de manifiesto que las preguntas filosóficas son inevitables en todos los campos de la cultura: en cualquiera de ellos hay, y seguirá habiendo en el futuro, prejuicios o ideas que es preciso cuestionar. Como afirma Bertrand Russell: “En todas las actividades es saludable, de vez en cuando, poner un signo de interrogación sobre aquellas cosas que por mucho tiempo se han dado como seguras”.
Resulta difícil encontrar una obra filosófica que no haga referencia a autores de épocas anteriores. El pasado puede ser una fuente constante de inspiración, dado que hay problemas filosóficos que están siempre vigentes. Al estudiar la historia de la filosofía, puede provocar desconcierto comprobar la diversidad de opiniones que existen respecto a cualquier problema filosófico. Incluso un mismo pensador puede haber defendido tesis opuestas en momentos diferentes de su vida.
Los filósofos y las filósofas no se limitan a seleccionar las ideas que mejor se adecuan a su forma de pensar y desentenderse del resto. Al contrario, tomar partido implica tener que justificar por qué las otras opiniones alternativas están equivocadas. En su aspiración por hallar la verdad, la filosofía avanza en una disputa constante. Uno de los compromisos de la filosofía consiste en enseñar a pensar con más claridad. Pensar de una manera más clara nos puede llevar a tomar decisiones más correctas y, por tanto, a una vida mejor.
1.LAS ETAPAS DE LA FILOSOFÍA.
1.1. Filosofía antigua (siglos VI a.C.- V d. C.)
En esta época se plantearon problemas que han marcado toda la tradición filosófica occidental. Los principales hitos de este período fueron los siguientes:
-Del mito al logos. La filosofía comenzó en Grecia en el siglo VI a.C., cuando se pusieron en cuestión las creencias mitológicas y se comenzó a aspirar a un conocimiento fundado en razones. Este cambio de mentalidad se resume en la expresión “el paso del mito al logos”. El logos- palabra griega que significa “razón”-, es decir, el conocimiento crítico y argumentado, pretende sustituir a los relatos míticos.
-El arché (principio). Los primeros filósofos reflexionaron sobre la naturaleza y todos se plantearon la misma pregunta: ¿cuál es el principio (arché, en griego) de todas las cosas? ¿cómo se ha originado la multiplicidad del mundo? Según estos filósofos, la aparente multiplicidad de la naturaleza tenía que haber surgido de un principio único.
-El giro antropológico. A pesar de no haber dejado ninguna obra escrita, Sócrates (470-399 a.C.) está considerado uno de los filósofos más influyentes de la historia. Este pensador impuso un giro antropológico a la filosofía en lugar de reflexionar sobre la naturaleza, como habían hecho sus antecesores, se dedicó exclusivamente a tratar problemas humanos, como la justicia, la convivencia y la vida moral.
-La reflexión metafísica. Platón (427-347 a.C.) fue discípulo de Sócrates y, como homenaje a su maestro, escribió diálogos en los que este era el protagonista. Aspiraba a superar el relativismo que defendían los sofistas, maestros de oratoria que enseñaban a los ciudadanos a ganar en cualquier debate y que partían del convencimiento de que la verdad no existía.
En su teoría de las ideas, Platón afirma que existen dos mundos: el mundo sensible, aparente y de sombras, que no puede ser objeto de conocimiento, y el mundo inteligible, un mundo real formado por ideas abstractas. Este dualismo también se encuentra en el ser humano, al considerar que está formado por un cuerpo mortal y un alma inmortal y eterna, que, antes de caer en el cuerpo, habitaba en el mundo inteligible. Para Paltón, aprender es recordar esas ideas con las que el alma estaba en contacto antes de unirse al cuerpo.
-Aristóteles (384- 322 a.C.) fue discípulo de Platón. Según este filósofo, en todo ser puede distinguirse una materia y una forma. La forma- la manera en la que se dispone la materia- es aquello que comparten los seres vivos de una misma especie y lo que los define. Se identifica con la esencia, con lo que una cosa es. Para Aristóteles, el conocimiento es sobre lo general, no sobre lo particular. La forma es, por tanto, la base para que haya conocimiento. Las ideas inteligibles de Platón ya no tenían que habitar en un mundo inteligible, sino que se encontrarían integradas en el mundo sensible. Según Aristóteles, la sustancia es cualquier objeto concreto, con su materia y su forma.
-Otra destacada discípula del pensamiento platónico fue Hipatia de Alejandría (355-415), que fue la directora de la escuela neoplatónica de Alejandría. Realizó importantes contribuciones a la ciencia en los campos de las matemáticas- escribió sobre secciones cónicas y sobre aritmética- y la astronomía. Revisó y mejoró las tablas astronómicas de la época con las que se podía predecir la posición de distintos objetos celestes-. Al igual que Platón, mantuvo una forma de vida ascética dedicada a la discusión filosófica. A pesar de que no se han conservado ninguna de sus obras, sí que han perdurado referencias a las mismas realzadas por sus discípulos. Fue acusada de defender a dioses paganos y murió como consecuencia de un brutal linchamiento.
1.2. Filosofía medieval (siglos V-XV)
Durante la Edad Media, la filosofía se pone al servicio de la teología. Los pensadores cristianos, judíos y musulmanes se sirvieron de esta disciplina para hacer comprensibles sus respectivos credos religiosos y sintetizaron su fe con las ideas procedentes principalmente de Platón y de Aristóteles. En el cristianismo, a la filosofía elaborada a partir de las ideas procedentes de Grecia y reconstruidas sobre la base del dogma cristiano se la denominó escolástica. Los problemas que se plantearon los autores escolásticos fueron, por ejemplo, si los conceptos universales existían o no fuera de la mente. Los dos filósofos más destacados de la época fueron Agustín de Hipona y Tomás de Aquino.
Agustín de Hipona (354-430) se inspiró principalmente en platón. Su pensamiento filosófico se centró en hacer comprensibles los dogmas cristianos referidos a Dios y al alma humana.
Tomás de Aquino (1224-1274) está considerado el teólogo más importante del cristianismo. Desataca por incorporar la herencia filosófica aristotélica al cristianismo. Este pensador estaba convencido de que existen razones para creer en todos los dogmas de fe. Encontró cinco argumentos, a los que llamó vías, para demostrar que Dios existe necesariamente. Por ejemplo, argumentó que todo lo que nos rodea es contingente, es decir, existe, pero podría no existir. Si no existiera un ser necesario, no existiría nada, de modo que tiene que haber un ser necesario- un ser que no puede no existir-, que se identifica con Dios.
Simultáneamente a la filosofía cristiana, surgieron una filosofía árabe y judía. En el mundo islámico hubo importantes pensadores como Avicena (980-1037) y Averroes (1126-1198) quienes conservaron la cultura griega, la tradujeron y la enriquecieron con nuevas aportaciones científicas y reflexiones filosóficas. Se esforzaron en señalar que el pensamiento racional era compatible con los dogmas de fe.
Dentro del judaísmo destacó Maimónides (1145-1204), quien trató de mostrar que los preceptos de la Torá son perfectamente compatibles con el pensamiento racional.
1.3. Renacimiento (siglo XVI)
El Renacimiento nació en Italia en el siglo XV y se extendió por toda Europa durante el siglo XVI. Esta época se caracteriza por el estudio de la Antigüedad clásica griega y romana.
En el ámbito de las ideas, el Renacimiento es la combinación de dos procesos: uno de retorno al pasado y de recuperación del ideal cultural clásico (humanismo) y otro de ruptura radical con nociones procedentes de la Antigüedad (nacimiento de la revolución científica)
-El humanismo. Fue un movimiento cultural, filosófico y pedagógico que quiso recuperar el pasado clásico griego y romano y convertirlo en referente educativo. En lugar de recurrir a la mediación religiosa como se hacía en el medievo, se impulsó un retorno a los textos originales, lo que dio lugar a la aparición de autores neoplatónicos (Marsilio Ficino y Giovanni Pico della Mirandola) y aristotélicos (Rodolphus Agricola). Este movimiento se caracteriza por su tendencia a la subjetividad que se refleja tanto en el arte (triunfo del retrato) como en el campo de las ideas (valoración de las experiencias y opiniones subjetivas). En el ámbito de la política, destacó Nicolás Maquiavelo, que independizó la esfera política del campo moral.
-La revolución científica. Este término define la crisis y el desmantelamiento del conocimiento tradicional, basado en el argumento de autoridad y su sustitución por el conocimiento basado en el método experimental. Fue un proceso que se extendió desde el Renacimiento hasta la Ilustración (siglo XVIII) y que dio lugar al nacimiento de la ciencia moderna. Este cambio fue impulsado principalmente por Galileo Galilei y culminado por Isaac Newton.
1.4. Filosofía moderna.
Uno de los filósofos más destacados de este período fue René Descartes (1596-1650), fundador del racionalismo. Descartes aseguró que había que dudar de los saberes heredados, de la tradición y defiende que la razón humana permite alcanzar todo el conocimiento. Para él, en el universo, todo- incluido el cuerpo humano- funcionaba de una manera mecánica y, por tanto, comprensible para la razón humana. Concibió al ser humano de forma dualista, formado por un cuerpo y un alma. En el alma es donde reside la voluntad y el libre albedrío.
En el siglo XVII surgieron dos grandes corrientes filosóficas:
-Racionalismo. Defiende la existencia de ideas innatas y considera que el conocimiento que proporcionan los sentidos no es fiable. Entre los filósofos racionalistas destacan, además de Descartes, Leibniz (1646-1716) y Spinoza (1632-1677).
-Empirismo. A diferencia del racionalismo, esta corriente afirma que las ideas proceden de los sentidos y de la experiencia. Sus principales representantes son Locke (1632-1704), Berkeley (1685-1753) y Hume (1711-1776). Locke está considerado también como el padre del liberalismo, dado que afirmó que todos los individuos tienen, desde su nacimiento, unos derechos y unas libertades inalienables- como el derecho a la vida y a la propiedad- y el Estado tiene la obligación de garantizar tales derechos. También propuso la separación de poderes.
En el siglo XVIII se desarrolló el movimiento de la Ilustración. Se caracteriza por la confianza en la razón y la defensa de la libertad de pensamiento. Entre sus principales representantes destacan Voltaire y Rousseau.
Kant (1724-1804) elaboró su pensamiento, el criticismo, tomando ideas de ambas corrientes. Comparte con los racionalistas la concepción de que no todo conocimiento procede de los sentidos, y con los empiristas la idea de que sin la información de los sentidos, no hay conocimiento. Kant defendía unas ideas morales según las cuales el ser humano tiene que ser tomado como un fin en sí mismo, jamás como un medio.
Anne-Louise Germaine Necker (1766-1817), conocida como Madame de Staël está considerada como la madre espiritual de la Europa moderna por ser la primera intelectual cuyo compromiso trascendió de su propio país (Francia). Divulgó las ideas de Rousseau e introdujo el pensamiento de Kant en Francia.
1.5. Filosofía contemporánea (siglos XIX-XX)
En el siglo XIX coincidieron corrientes tan opuestas entre sí como el idealismo de Hegel (1770-1831), que creó uno de los últimos grandes sistemas filosóficos de la historia, y el positivismo de Comte (1798-1857), para quien solo aquellas ideas que se refieren a hechos observables tienen sentido.
Este siglo también estuvo marcado por la presencia de tres críticos de la cultura occidental: Marx, Nietzsche y Freud, a los que se los conoce como filósofos de la sospecha:
-Marx (1818-1883) quiso explicar en qué consistía la sociedad capitalista de su tiempo y de qué manera se había desarrollado la historia humana. Pretendía incorporar a la filosofía una práctica revolucionaria para transformar la realidad económica, política y social. Marx consideraba que los filósofos se habían limitado a interpretar el mundo de distintos modos, pero de lo que se trataba era de transformarlo. Interpretó el desarrollo histórico de la humanidad en clave exclusivamente materialista, explicando que las transformaciones sociales son cambios en las relaciones de producción de los bienes materiales. Las contradicciones inherentes a la sociedad provocan enfrentamientos que acaban promoviendo transformaciones sociales en todos los niveles.
-Nietzsche (1844-1900), con su “filosofía a martillazos”- tal como él mismo la describió-, se propuso criticar la ética, la metafísica y la ciencia de su tiempo. Sobre la ética, afirmó que el cristianismo y el socialismo habían logrado imponer y diseminar unos valores igualitarios que fomentaban un espíritu gregario y sometido. Cualquier expresión de placer se condena por considerarlo pecaminosos y algo por lo que hay que sentirse culpable. Sobre la metafísica, afirmó que la división platónica entre un mundo inteligible y un mundo sensible solo pretende relegar el mundo sensible- el único mundo que existe, dado que, según Nietzsche, el mundo inteligible es una invención- a ser una realidad inferior, secundaria y rechazable. Por eso proponía la transvaloración de los valores, superar esos valores igualitarios y recuperar los valores nobles y estilistas.
En todos estos aspectos de la cultura occidental se promueven unos valores de muerte y sometimiento que conducen al ser humano a considerar que la vida carece de sentido. Frente a estos valores, Nietzsche promueve una forma de encarar la vida radicalmente opuesta donde se valores la creatividad y el individualismo.
-Freud (1856-1939) fue el descubridor del inconsciente. Para Freud, la mente humana es semejante a un iceberg, donde la parte visibles, que se corresponde con el elemento consciente, es el aspecto de menor rango si se compara con la parte invisible, identificada por el inconsciente. En el inconsciente se encuentra la clave que permite explicar y entender la conducta humana y muchos de los trastornos psíquicos como la neurosis. Freud ideó una terapia que pretendía curar dichas neurosis haciendo que los traumas emergieran a la conciencia. Para explicar el inconsciente, Freud desarrolló un método, llamado psicoanálisis, basado en la asociación libre, por el que el terapeuta permite al paciente enlazar palabras hasta que en un momento dado emerge el conflicto que se mantenía oculto.
En el siglo XX una de las corrientes de pensamiento más importante fue la filosofía analítica, que se caracterizó por su preocupación por el lenguaje. Entre los filósofos más destacados se encuentran Russell (1872-1970) y Wittgenstein (1889-1951).
Otra de las corrientes de este siglo es el existencialismo. Esta doctrina, inspirada en la obra de Kierkegaard (1813-1855), proclamaba la prioridad de la vida, de los sentimientos y de la experiencia personal, frente a la visión mecanicista del mundo propia del racionalismo.
-Hannah Arendt (1906-1975) fue una pensadora alemana que, por sus raíces judías, tuvo que refugiarse en Estados Unidos para escapar del nazismo. Su obra principal, Los orígenes del totalitarismo, estudia las formas que adoptan estos gobiernos. Eichmann en Jerusalén es una recopilación de escritos periodísticos, muy polémicos en su época, sobre el juicio de Eichmann, funcionario nazi juzgado en los juicios de Nuremberg. Para Arendt, el mal que llevó a los campos de concentración a millones de personas podía adquirir un aspecto funcionarial, como ocurría con Eichmann.
(Roger Corcho Orrit, Alfredo Corcho Asenjo. 1Filosofía. Editorial Anaya. Madrid. 2022)